Rolando calla la boca a medios con $1,000 millones, señala Mayaleaks

En nueva entrega el portal de Mayaleaks publica que el gobierno de Rolando Zapata Bello gastó $1,007.413,633 en comunicación social y publicidad en cuatro años de gestión, a un ritmo diario de $692,000, de acuerdo con documentos oficiales consultados por la red de investigadores de Mayaleaks. Esta cuantiosa cantidad, que representa un gasto per cápita de 480 pesos y que se ejerce sin rendir cuentas claras, ha permitido al gobernador financiar una costosa campaña publicitaria en los medios de comunicación locales y nacionales, muchos de los cuales aceptan ventajosos contratos de publicidad gubernamental —desesperados ante la debacle de la publicidad privada, por el avance de Internet— en detrimento de su independencia editorial y en contra del derecho a saber de los ciudadanos. No conforme con este enorme gasto en comunicación social, realizado desde el primero de octubre de 2012, cuando tomó posesión, hasta septiembre del año pasado, Zapata Bello solicitó y obtuvo del Congreso del Estado autorización para gastar otros 267 millones 150,421 pesos en 2017, un aumento del 11.8 por ciento respecto a 2016. Este año, el Congreso autorizó al gobierno estatal destinar a Comunicación 238 millones 770,013 pesos, de los cuales hasta septiembre ya se habían gastado 172 millones 413,394 pesos, de acuerdo con la Secretaría de Administración y Finanzas. COMO IVONNE. En los últimos tres meses de 2012, que corresponden al inicio de su gestión, el actual gobierno gastó en comunicación social 145 millones 805,879 pesos, a un ritmo diario de ¡un millón 620,065 pesos!, según la Cuenta Pública de ese año. Ese año, final del periodo de Ortega Pacheco y principios del de Zapata Bello, el gobierno estatal desembolsó en total 377 millones 900,000 pesos en comunicación social y publicidad —la cifra más alta en la historia del Estado— de los cuales, 232 millones 100,000 pesos correspondieron a Ivonne Ortega y el resto, como ya dijimos, a su sucesor. (Ver: “Rolando Zapata gasta más en publicidad que Ivonne Ortega”. http://mayaleaks.org.mx/rolando-zapata-gasta-mas-en-publicidad-que-ivonne-ortega/). En 2013, el gasto ascendió a 166 millones 900,000 pesos, en 2014 a 266 millones 008,754 pesos, y en 2015 a 256 millones 285, 606 pesos, para  un total de mil siete millones 413,633 pesos. Esta cifra se acerca, y en los próximos meses la rebasará, a la que Ivonne Ortega (2007-2012) gastó en el mismo rubro en 62 meses de gestión y que ascendió a mil 79 millones 497,604 pesos. (El gobierno de Chihuahua reveló la semana pasada que el ex gobernador priista César Duarte gastó en convenios de publicidad tres mil 662 millones 278 pesos, en su periodo de 2010 a 2016. http://www.proceso.com.mx/467784/3-mil-500-mdp-derroche-cesar-duarte-en-publicidad-oficial). “No te pago para que me pegues”, ese es el mensaje que da el gobierno. VENTAJA PARA CABALLERO. Respecto a la partida de Comunicación Social autorizada por el Congreso para 2017 —de 267 millones 150,421 pesos— el Presupuesto de Egresos prevé destinar cien millones de pesos a comunicación y publicidad en el ramo de turismo y 35 millones 753,750 pesos a la Secretaría de Educación del gobierno del estado (Segey), dentro de las partidas 3610 y 3620, “difusión por radio, televisión y otros medios de mensajes sobre programas y actividades gubernamentales” y para “promover la venta de bienes o servicios”, respectivamente. En 2017 se decidirá el nombre de los candidatos para las elecciones de 2018. El titular de la Segey, Víctor Caballero Durán es, casualmente, uno de los favoritos de Zapata Bello para sucederlo en el cargo. Otros 126 millones 702,000 pesos, del presupuesto de Comunicación de 2017 se distribuirán en las demás dependencias y 20 millones 631,927 pesos en el pago de sueldos y salarios, así como 10 millones 685,500 pesos en apoyo administrativo y seis millones 990,000 pesos en gastos de “orden social y cultural”. BOLETINES COMO NOTICIAS. El presupuesto de Comunicación para 2017 es más grande que el destinado a la Secretaría de la Cultura y las Artes, 230 millones 578, 260 pesos, y al de la Secretaría de Investigación, Innovación y Educación Superior que asciende a 205 millones, 073,099 pesos. Los más de mil millones de pesos ejercidos por la administración de Zapata Bello en comunicación social y publicidad oficial —es decir, la compra de espacios en los medios por parte de los gobiernos— se han utilizado sin que se conozcan los criterios para hacerlo. Tampoco se sabe cómo se asigna el presupuesto a cada medio, la mayoría de los cuales publica “noticias” que en realidad son boletines de prensa pagados.  Sin reglas claras para su asignación, la publicidad oficial se transforma en una herramienta para castigar o premiar a los medios de comunicación en función de su línea editorial: “no te pago para que me pegues”, ese es el mensaje que da el gobierno. Además, este cuantioso presupuesto afecta seriamente la independencia de los medios y la libertad de expresión y establece vínculos financieros opacos entre medios y gobiernos que, a su vez, sientan las bases de una relación en la cual los intereses económicos y políticos prevalecen sobre la pluralidad informativa y el derecho a saber. (ML).

En nueva entrega el portal de Mayaleaks publica que el gobierno de Rolando Zapata Bello gastó $1,007.413,633 en comunicación social y publicidad en cuatro años de gestión, a un ritmo diario de $692,000, de acuerdo con documentos oficiales consultados por la red de investigadores de Mayaleaks. Esta cuantiosa cantidad, que representa un gasto per cápita de 480 pesos y que se ejerce sin rendir cuentas claras, ha permitido al gobernador financiar una costosa campaña publicitaria en los medios de comunicación locales y nacionales, muchos de los cuales aceptan ventajosos contratos de publicidad gubernamental —desesperados ante la debacle de la publicidad privada, por el avance de Internet— en detrimento de su independencia editorial y en contra del derecho a saber de los ciudadanos. No conforme con este enorme gasto en comunicación social, realizado desde el primero de octubre de 2012, cuando tomó posesión, hasta septiembre del año pasado, Zapata Bello solicitó y obtuvo del Congreso del Estado autorización para gastar otros 267 millones 150,421 pesos en 2017, un aumento del 11.8 por ciento respecto a 2016. Este año, el Congreso autorizó al gobierno estatal destinar a Comunicación 238 millones 770,013 pesos, de los cuales hasta septiembre ya se habían gastado 172 millones 413,394 pesos, de acuerdo con la Secretaría de Administración y Finanzas. COMO IVONNE. En los últimos tres meses de 2012, que corresponden al inicio de su gestión, el actual gobierno gastó en comunicación social 145 millones 805,879 pesos, a un ritmo diario de ¡un millón 620,065 pesos!, según la Cuenta Pública de ese año. Ese año, final del periodo de Ortega Pacheco y principios del de Zapata Bello, el gobierno estatal desembolsó en total 377 millones 900,000 pesos en comunicación social y publicidad —la cifra más alta en la historia del Estado— de los cuales, 232 millones 100,000 pesos correspondieron a Ivonne Ortega y el resto, como ya dijimos, a su sucesor. (Ver: “Rolando Zapata gasta más en publicidad que Ivonne Ortega”. http://mayaleaks.org.mx/rolando-zapata-gasta-mas-en-publicidad-que-ivonne-ortega/). En 2013, el gasto ascendió a 166 millones 900,000 pesos, en 2014 a 266 millones 008,754 pesos, y en 2015 a 256 millones 285, 606 pesos, para  un total de mil siete millones 413,633 pesos. Esta cifra se acerca, y en los próximos meses la rebasará, a la que Ivonne Ortega (2007-2012) gastó en el mismo rubro en 62 meses de gestión y que ascendió a mil 79 millones 497,604 pesos. (El gobierno de Chihuahua reveló la semana pasada que el ex gobernador priista César Duarte gastó en convenios de publicidad tres mil 662 millones 278 pesos, en su periodo de 2010 a 2016. http://www.proceso.com.mx/467784/3-mil-500-mdp-derroche-cesar-duarte-en-publicidad-oficial).

“No te pago para que me pegues”, ese es el mensaje que da el gobierno.

VENTAJA PARA CABALLERO. Respecto a la partida de Comunicación Social autorizada por el Congreso para 2017 —de 267 millones 150,421 pesos— el Presupuesto de Egresos prevé destinar cien millones de pesos a comunicación y publicidad en el ramo de turismo y 35 millones 753,750 pesos a la Secretaría de Educación del gobierno del estado (Segey), dentro de las partidas 3610 y 3620, “difusión por radio, televisión y otros medios de mensajes sobre programas y actividades gubernamentales” y para “promover la venta de bienes o servicios”, respectivamente. En 2017 se decidirá el nombre de los candidatos para las elecciones de 2018. El titular de la Segey, Víctor Caballero Durán es, casualmente, uno de los favoritos de Zapata Bello para sucederlo en el cargo. Otros 126 millones 702,000 pesos, del presupuesto de Comunicación de 2017 se distribuirán en las demás dependencias y 20 millones 631,927 pesos en el pago de sueldos y salarios, así como 10 millones 685,500 pesos en apoyo administrativo y seis millones 990,000 pesos en gastos de “orden social y cultural”. BOLETINES COMO NOTICIAS. El presupuesto de Comunicación para 2017 es más grande que el destinado a la Secretaría de la Cultura y las Artes, 230 millones 578, 260 pesos, y al de la Secretaría de Investigación, Innovación y Educación Superior que asciende a 205 millones, 073,099 pesos. Los más de mil millones de pesos ejercidos por la administración de Zapata Bello en comunicación social y publicidad oficial —es decir, la compra de espacios en los medios por parte de los gobiernos— se han utilizado sin que se conozcan los criterios para hacerlo. Tampoco se sabe cómo se asigna el presupuesto a cada medio, la mayoría de los cuales publica “noticias” que en realidad son boletines de prensa pagados.  Sin reglas claras para su asignación, la publicidad oficial se transforma en una herramienta para castigar o premiar a los medios de comunicación en función de su línea editorial: “no te pago para que me pegues”, ese es el mensaje que da el gobierno. Además, este cuantioso presupuesto afecta seriamente la independencia de los medios y la libertad de expresión y establece vínculos financieros opacos entre medios y gobiernos que, a su vez, sientan las bases de una relación en la cual los intereses económicos y políticos prevalecen sobre la pluralidad informativa y el derecho a saber. (ML).

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