Profesora de la UNAM mezcla "conocimiento con el placer" para enseñar a estudiantes

Divulgadora de la ciencia recurre al "reto" de poner a sus alumnos a superar situaciones adversas
A sus 70 años, la profesora Julieta Fierro es conocida como la "rockstar de la ciencia" por los peculiares métodos que utiliza para inculcar a sus alumnos el amor por la astronomía tratando que el conocimiento y el placer vayan de la mano.
La investigadora del Instituto de Astronomía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) explicó hoy a Efe que intenta que los estudiantes "asocien el conocimiento con el placer" y para ello es capaz de llegar a clase en patines y una cesta con dulces o incluso dar condones al terminar cada lección.
Para aunar estos dos conceptos, esta divulgadora de la ciencia recurre al "reto" de poner a sus alumnos a superar situaciones adversas.
"Cuando estás en una situación de reto por encima de tus habilidades, sientes que fluyes y te sientes bien", señaló la profesora, asociando la superación humana como una fuente de placer para los estudiantes, estrechamente ligada al aprendizaje.
Tampoco faltan los chistes y las carcajadas de sus alumnos en las lecciones de astronomía porque siempre trata de empezar "con algo jocoso" para romper el hielo.
Tras las risas y los dulces, Fierro pretende que sus discípulos reflexionen "más allá de los objetos celestes" y se maravillen y estimulen pensando "cómo la inteligencia humana ha logrado resolver problemas tan complejos".
Durante su carrera, la astrónoma realiza demostraciones a los alumnos utilizando objetos y figuras de todo tipo para ejemplificar teorías abstractas; objetos que todavía cuelgan de las paredes de su despacho.
Con los ejemplos visuales los alumnos recuerdan mejor una lección, ya que al poder tocar y mirar los objetos aumenta su capacidad de retención.
"Si yo explico que Urano va rodando sobre su eje, te lo puedes imaginar, pero si en ese momento doy una varometa (voltereta) en el piso a los alumnos jamás se les olvidará", aseguró la ganadora del premio Kalinga a la divulgación de la ciencia otorgado por la Unesco en 1995.
A lo largo de los años, no han faltado los alumnos brillantes porque Fierro tiene una habilidad especial para detectar el talento.
Los estudiantes más destacados son aquellos que lanzan una pregunta que no tiene respuesta, un indicativo de que el alumno tiene capacidad para traspasar los límites establecidos, cuestionar lo que ya existe y cambiarlo, y es que "la ciencia solo avanza cuando las preguntas no tienen respuesta".
Pese a vivir en un mundo en el que se lee poco, la experta asegura que las generaciones venideras "harán cosas maravillosas" y afirmó que "son más inteligentes que sus padres y abuelos", debido a que están desarrollando habilidades nuevas con las nuevas tecnologías.
La investigadora trata también de impulsar un sistema de educación a distancia, algo que estima debe convertirse en un pilar esencial de los sistemas educativos de todo el mundo.
"Tenemos que hacer una apertura en educación, que cada cual aprenda lo que necesita, cuando lo necesita, con el profesor que es adecuado para él", aseveró.
Por ello, reivindicó la necesidad de disponer de "una gama amplísima de cursos a distancia, modernos, actuales" y que no necesiten de burocracia para realizarlos.
Con este sueño todavía por cumplirse, Fierro continúa enseñando en la universidad y graba sus clases en video en las que explica con objetos la complejidad de las galaxias o el funcionamiento del planeta Tierra. (Loco Mundo).

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