Tras admitir que se equivocó y que nada justifica la forma en que trató a los elementos policiacos durante el momento de su detención, aclaró que los videos difundidos fueron editados pues no aparece en ellos el momento en el que la agreden y ella responde que no permitirá que la desaparezcan.

Pidió no desestimar el abuso porque existe una violación acreditada por las propias autoridades y reiteró que de nada le sirve ser sobreviviente sin paz, justicia, sin reparación del daño y de nada le serviría esto si sigue el nivel de impunidad y con la violación al debido proceso.

Entrevistada en el estudio de Ciro Gómez Leyva denunció que a partir de la denuncia que presentó ante la Fiscalía del estado de Guerrero, ha sido víctima de intimidación por lo que pide que la Procuraduría General de la República (PGR) atraiga su caso, del cual ya tiene conocimiento la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

Insistió en que ella tiene en su poder los videos, que son parte de la investigación y que no será ella quien viole el debido proceso como ya lo hizo la Fiscalía, al filtrar fragmentos de su declaración ministerial, lo cual condenó.

Lamentó la criminalización de la que ha sido objeto por su conducta y trato a los elementos policiacos, pero insistió en que nada justifica ni la violación sexual, ni las faltas cometidas en su contra a partir de la denuncia.

"Yo sabía que esto podía pasar, yo conocía los videos, y aun así denuncié sabiendo que me enfrentaba con la criminalización a defensoras o no. Estoy dando la cara, no justifico mi comportamiento pero eso no debe desvirtuar un acto como la violación sexual, la tortura y la detención arbitraria", insistió la activista quien reveló que la CNDH le aplicó el Protocolo de Estambul para determinar si hubo tortura.