Eso equivale a unos 15 metros cuadrados
y es la medida
de los micro-apartamentos de Hong Kong que vende el gigante
inmobiliario Henderson Land Development por poco menos de 500 mil dólares. Un Tesla
Modelo X en Hong Kong parte de unos 150 mil dólares.
Conforme los precios de las viviendas en Hong Kong alcanzan nuevas alturas y
siguen haciendo de la ciudad la menos asequible del mundo en materia de
vivienda, desarrolladores como Cheung Kong Property Holdings del
multimillonario Li Ka-shing, Kowloon Development y Henderson Land ofrecen cada
vez más unidades de menor superficie. Otro desarrollador, Chun Wo Property
Development, planea construir apartamentos de tan sólo 12 metros cuadrados
aproximadamente el tamaño de un cobertizo de jardín de California-.
Mientras que los apartamentos pequeños representaban sólo el 5 por ciento de
las viviendas nuevas en 2010, desde el año pasado saltaron a 27 por ciento, de
acuerdo con cifras del Gobierno que pronostican un aumento a 43 por ciento el
año que viene. Sin embargo, los precios subieron 99 por ciento en 2010-2016
-más del doble del ritmo de las viviendas más grandes, que son inasequibles
para la mayoría de la población de Hong Kong-.
"El grupo de los compradores de apartamentos pequeños es cada vez más
grande porque la gente tiene que reducir sus expectativas respecto del tamaño
de los apartamentos en que puede vivir", dijo Nicole Wong, directora
regional de análisis inmobiliario de CLSA en Hong Kong.
El aumento del costo de las unidades pequeñas queda
demostrado por el precio del pie cuadrado: en el desarrollo de la ciudad de
Kowloon , un apartamento de 17 metros cuadrados (181 pies cuadrados) en un piso
alto se vendió en mayo por 25 mil 897 dólares de Hong Kong (3 mil 321 dólares
estadounidenses) el pie cuadrado, o 4.69 millones de dólares de Hong Kong. Un
apartamento más grande de similar ubicación se vendió dos días después por 23
mil 47 dólares de Hong Kong el pie cuadrado, una diferencia de 2 mil 183
dólares de Hong Kong.
La tendencia refleja las consecuencias imprevistas de las políticas del
Gobierno destinadas a enfriar el mercado inmobiliario pero que, por el
contrario, están impulsando la demanda de apartamentos más pequeños. Los
desarrolladores, que buscan ayudar al Gobierno a alcanzar los objetivos de oferta
y al mismo tiempo bajar el umbral de precio del comprador, necesitan recuperar
los precios récord que pagan en las subastas de terrenos, por lo que construyen
más unidades por predio.
Hasta los espacios de estacionamiento de Hong Kong cuestan más que las
viviendas en gran parte del mundo desarrollado. Uno en un edificio de primer
nivel de Hong Kong se vendió por el equivalente a 664 mil 300 dólares
estadounidenses en abril, informó el diario local Ming Pao esta semana.
Carrie Lam, la jefa electa del Ejecutivo de Hong Kong, que asumirá el 1 de
julio, el vigésimo aniversario del regreso de Hong Kong al dominio chino,
prometió aumentar los porcentajes de propiedad de viviendas dando ayuda
gubernamental a las personas demasiado ricas para tener una vivienda pública y
demasiado pobres para comprar un apartamento propio.
El Gobierno, que defiende el libre mercado, no tiene planes inmediatos para
evitar que el tamaño de las viviendas se reduzca aún más.
"En este momento, el Gobierno deja la flexibilidad en manos del mercado
para que los desarrolladores puedan responder adecuadamente a las necesidades
del mercado", dijo Terry Wong, un portavoz del Gobierno.